domingo, 28 de febrero de 2010

Una sola palabra tuya quiebra la ciega soledad en mil pedazos...

Regresabamos de una fiesta y me topé con el párrafo de un gallego: Agustín Fernández Paz. (O único que queda é o amor), es una colección de cuentos que encierra poemas y citas. Sobre todo de su admirado Valente. Llevo el resto de la noche musitando el poema

Una sola palabra tuya quiebra la ciega soledad en mil pedazos...
Una sola palabra tuya quiebra la ciega soledad en mil pedazos...
Una sola palabra tuya quiebra la ciega soledad en mil pedazos...

Y no puedo evitar transcribirlo:

SÉ TÚ MI LÍMITE
Tu cuerpo puede
llenar mi vida,
como puede tu risa
volar el muro opaco de la tristeza.
Una sola palabra tuya quiebra
la ciega soledad en mil pedazos.
Si tú acercas tu boca inagotable
hasta la mía, bebo
sin cesar la raíz de mi propia existencia.
Pero tú ignoras cuánto
la cercanía de tu cuerpo
me hace vivir o cuánto
su distancia me aleja de mí mismo
me reduce a la sombra.
Tú estás, ligera y encendida,
como una antorcha ardiente
en la mitad del mundo.
No te alejes jamás:
Los hondos movimientos
de tu naturaleza son
mi sola ley.
Retenme.
Sé tú mi límite.
Y yo la imagen
de mí feliz, que tú me has dado.
J.A. Valente, Punto Cero